El fabricante de aviones europeo, Airbus, admitió ayer que una fuga de datos en sus sistemas permitió a los intrusos acceder a parte de la información personal de algunos de sus empleados.
Aunque la compañía no dio detalles sobre la naturaleza del hackeo, afirmó que la violación de la seguridad no afectó a sus operaciones comerciales, es decir, no hubo un impacto en la producción de aviones.
Airbus confirmó que los atacantes accedieron a algunos datos a principios de este mes, que según el fabricante del avión eran, en su mayoría, contactos profesionales e información de identificación de algunos empleados.
Después de detectar la brecha de seguridad, el fabricante inició una investigación para determinar el origen del hackeo y para comprender el alcance completo de la fuga de datos y si se buscaba algún dato específico.
La compañía ha comenzado a tomar medidas de inmediato, de modo que pueda evitar incidentes similares en el futuro.
La compañía también ha instruido a sus empleados a tomar todas las precauciones necesarias para para fortalecer sus defensas de seguridad.
Airbus también dijo que estaba en contacto con las autoridades reguladoras pertinentes y las autoridades de protección de datos de conformidad con las nuevas normas de la Unión Europea RGPD (Reglamento General de Protección de Datos).
Airbus es el segundo mayor fabricante de aviones comerciales del mundo, después de Boeing, que también recibió un ataque cibernético (una variante del infame ransomware WannaCry) en marzo del año pasado, que afectó a una pequeña cantidad de sistemas sin impacto en la producción.