WhatsApp, recientemente, ha parcheado una vulnerabilidad crítica
en la aplicación de Android. Esta vulnerabilidad permaneció presente en la aplicación
durante 3 meses después de ser descubierta hasta que fue corregida.
El problema surgía de un error de corrupción de la memoria que usaba la aplicación, el cual no residía dentro del código de WhatsApp, sino que estaba dentro de una biblioteca de imágenes GIF utilizada por la
aplicación.
Lo grave del asunto es lo que pudo ocasionar este error, que no es ni más ni menosque el poder ejecutar
código remotamente por parte de terceros, permitiendo a los atacantes tomar el control del dispositivo y acceder a todo su contenido.
Por ello, desde Intec os recomendamos tener actualizada la aplicación de WhatsApp a su última versión y mantenerla actualizada siempre que sea posible.