AMD, uno de los mayores fabricantes de componentes del mundo, ha comunicado recientemente que, a finales de 2019, mantuvieron conversaciones con una persona que afirmaba haber obtenido documentación interna sobre las tarjetas gráficas actuales y futuras de la compañía, incluso información sobre el componente que incorporará la nueva consola de Microsoft, la Xbox Series X.
El asunto supone un revés para la compañía estadounidense, ya que podría desvelar su futura línea de negocio y perder competitividad contra sus dos grandes rivales en el mercado: Intel en el mercado de las CPU y Nvidia en el de las GPU.
La persona autora del robo solicita la nada despreciable suma de 100 millones de dólares por el rescate de los archivos sustraídos. AMD ha revelado que está trabajando con las autoridades para resolver quién, cuándo y cómo ha podido robar esta información.