La empresa, con sede en Nueva York, descubrió que terceros no autorizados habían accedido a nombres, información de pruebas clínicas y unos 600.000 números de seguridad social. La compañía se comprometió a avisar a las personas y reguladores afectados.
Entre los procedimientos seguidos, la compañía desconectó sus sistemas de la red y contrató a expertos para tratar de paliar la situación. Hasta el momento, ningún grupo cibercriminal se ha atribuido estos hechos, según recoge el medio The Record.
No es la primera empresa de biotecnología que sufre un incidente de este tipo. En Marzo la víctima fue el gigante indio Sun Parmaceuticals.
Fuente: Escudo Digital